martes, 24 de febrero de 2009

Érase una vez un hombre con tres cabezas

Y las tres pensaban por si mismas! Una era lógica y las otras dos se basaban en instintos, así que el señor decidió amputarse una de ellas, que tantas le producían dolor…


Estoy hablando de un caso del año 2006 ya. Un indio que tenía dos penes. Sí, sí, he usado lo de las cabezas y eso, perdón, pero es que si buscáis en Internet “indio dos penes” salen mogollón de enlaces y en inglés más de lo mismo y supongo que en más idiomas también. Y aunque hoy en día cuando lo cuento en sociedad nadie recuerda esa noticia o no la escucharon, no quería repetirme más de lo mismo.


http://www.hoy.es/prensa/20060820/sociedad/indio-opera-penes-nacio_20060820.html

http://news.softpedia.com/news/The-Indian-Man-With-Two-Fully-Functioning-Penises-Wants-to-Have-One-Removed-33311.shtml


Ahí van dos retales de noticias, la que está en inglés detalla más asuntos, aunque no explica lo que yo me pregunté al oírla:


  1. qué son exactamente dos penes funcionales? Mea y eyacula por ambos a discreción? A la vez? Puede elegir uno u otro? Si tapa por un lado sale todo por el otro a presión? Se le puede erguir uno y el otro seguir ahí mustio?? Qué periodistas son que no investigan esto???
  2. Estaban uno al lado del otro como los tiburones? O uno encima del otro? Y si es lo primero, los dos inclinaban al mismo lado o era bizco? Y si era uno encima del otro tenía que ser como un dildo de esos dobles… qué cosas!


La segunda noticia, además de mostrar una foto muy descriptiva, cuenta que desde 1609 sólo se han prescrito 100 casos de duplicación de pene, aunque uno de cada 5’5 millones de hombres es propenso a padecer este desorden congénito. Si hacemos cuentas, en el mundo ahora mismo somos, según el reloj de la población mundial de la wikipedia actualizado a 22 de Febrero del 2009: 6 .762 .287.342 uno arriba, uno abajo… iba a seguir calculando porque dicen hay 96 hombres por cada 100 mujeres… pero he visto que alguien los ha contado: son 3051 millones aproximadamente. Es decir, en el mundo tiene que haber 554 hombres con dos penes!!! y uno con un grano gordo en él (no me ha salido exacta la cuenta). Alucinante si lo pensáis… alguna vez os habéis tenido que encontrar con uno así en un baño público…


Pero lo raro de este caso es que se trata de la primera vez que el susodicho tenía ambos funcionales, normalmente es un apéndice colgante que solo estorba. Y por supuesto, aunque estas noticias no lo cuenten, yo había leído en su día que una productora pornográfica estaba muy interesada en él, pero desechó vivir de eso y quería casarse y hacer vida normal… y la mujer habría opinado al respecto?

domingo, 22 de febrero de 2009

¿Por qué llueve siempre en fin de semana?

Hace tiempo había oído que unos científicos ingleses hicieron un estudio en Londres sobre las razones por las que en esa ciudad llovía siempre los fines de semana. Ganaron un premio y a mi me convencieron. La razón es la polución. Durante la semana se genera mucha contaminación, que se va acumulando en la atmósfera. Se usa mucho transporte para trabajar, mínimo ida y vuelta a la oficina, casi todo el mundo trabaja de lunes a viernes y en fin de semana uno se encuentra con menos tráfico, menos atascos (exceptuando el domingo de vuelta a casa, que todos decidimos llegar a la misma hora a nuestro hogar) y los horarios del transporte público disminuyen la frecuencia. Así pues, al cielo le damos un respiro y al dejar de mandar gases a la atmósfera, las nubes se vengan descargando todo sobre nuestro picnic, idea de sacar la bici o paseo por el parque dominguero. Muy simple, lo cual me pareció que también explicaba por qué muchas veces llueve toooooda la noche y cesa por la mañana, supongo yo que será por la misma razón.

La cosa es que me puse a buscar el estudio en cuestión. En castellano no encontré nada y en inglés sólo un artículo que dice lo contrario. Sorpresa la mía! Este otro estudio es de la NASA.

Parece que en USA tienen suerte y sólo les llueve entre semana, mientras que los findes pueden salir a comer perritos calientes y jugar al béisbol (o lo que quiera que hagan allí).
Según ese estudio, la razón es la misma, la polución generada por las tareas humanas diarias. Ellos dicen que llueve más de martes a jueves que de sábado a lunes. "The team found that, on average, it rained more between Tuesday and Thursday than from Saturday through Monday." Los viernes los debieron de quitar del calendario o es que tienen sesión de tornados y no cuentan...

En un foro hablaban de ello y la mayoría de los que posteaban coincidían conmigo en que les llueve más en fin de semana, uno de ellos graciosamente cabreado: "Then why is it always so nice while im here at work and rainy and ***** on the weekends? Tell me why SCIENTIST." No se si se cortó un poco, pero yo creo que con el tono que va le falta añadir: "eh? eh? CIEN-TÍ-FICOS?? eh? eh? decidme!! decidme!!". Os dejo las opiniones del foro por si queréis echarle un vistazo, que a mi me hicieron gracia, hay gente muy cabreada por no poder salir los fines de semana de casa sin paraguas.

Bueno, gente rara de por medio, si alguien encuentra el estudio que yo comento, el de los londinenses mojados en fin de semana, que me mande el link, please.

sábado, 21 de febrero de 2009

Diccionario Asturiano-Pucelano (II)

Bueno, bueno, bueno... es fin de semana, me estoy tomando una cervecita y como ya expliqué la razón del porqué un diccionario para que los asturianos y los pucelanos se entiendan, sin más os dejo unas palabrejas nuevas, no se me vaya a calentar la birra:


Rodillo: Esta palabra me negué siempre a quitarla de mi vocabulario. Un rodillo es un “trapo o paño de cocina”, pero aunque me sigan mirando raro cada vez que lo digo, es más corto! sin más! menos palabras! Sí, también llamamos rodillo al de amasar.


Rizoso: Más allá de Pajares no me entendían cuando describía a una persona, así que me acostumbré a decir “de pelo rizado”. Con el poco agua que hay por Castilla y la de saliva que gastan!! Una persona rizosa es un hombre o mujer que tiene el pelo rizado, no hay más intríngulis. Al igual que un rubio es uno con el pelo rubio.


Pingar: A parte de que algo que pinga es algo que cuelga, y que poner a alguien pingando es ponerlo a parir o verde, etc, en Asturias estar pingando es estar mojado, muy mojado, tanto que el agua pinga. Como curiosidad, en Valencia pingar es algo así como levantarse de un salto o brincar. “el niño pingó del columpio”. Digo en tal sitio o cual, porque es el significado común que usan en la región, pero todas las acepciones se encuentran en la RAE.


Chiscar: salpicar. “Me chiscó el coche ese” típica situación día de lluvia esperando en semáforo a pasar y un coche te deja pingando (vamos a usar vocabulario autóctono). La amiga a la que se lo dije me preguntó: “qué te hizo el coche???”-“ Me dejó pingando.”-“El qué?”. Chiscar es entendido como sacar chispas, que es más bien lo contrario; Chiscar el mechero, por ejemplo. Y de hecho es el único significado que encontré en el diccionario.


Prestar: Este verbo es transitivo, prestas algo, dejas una cosa (con vuelta, ojo). Excepto si se usa como “gustar”. Muy típico decir en Asturias: “lo que me está prestando esto!” “te prestó?”. Otro que no esté familiarizado te diría: “¿quién me tenía que prestar el qué?”


Mancar: Herir en brazos o piernas (de manco, mancar), pero un significado más suave es lastimar. “¿Te mancaste?” se le pregunta a alguien que se dio un golpe, no tiene por qué haberse quedado como Cervantes, un leve golpe sirve. O también "máncanme los zapatos "= "los zapatos me lastiman". Lo de poner los pronombres al final es otra característica bien conocida del asturiano.


Voladores: que vuelan, sí. Pero en Asturias se llama así a los… pues la verdad que no sé muy bien. Cohetes, eso. Cuando son fiestas y así, que se tiran cohetes, eso son "voladores", una vez se lo explicaba a uno y no sabía otro sinónimo, y me entendía los fuegos artificiales y yo decía, no, esos no, sino los que hacen fiuuuuuuuuuuuu pum! Y ves una nube de humo, esos! Si es que soy como un libro abierto...

jueves, 19 de febrero de 2009

Cuestión de palabras

Siguiendo con la temática de ayer, los malos entendidos en el mismo idioma, me acordé de dos anécdotas que ocurrieron en el trabajo:

La primera de ellas mientras un comercial estaba leyendo la documentación de un proyecto para Galicia que rezaba así: “En Galicia tenemos machos, hembras y vacas”. Pues muy bien está saberlo! los que vayan de ligue a Galicia, que anden con ojo, que esa es la fauna autóctona discotequera. Machos, hembras y vacas. El tío que lo leía no podía dejar de reír, a esto que el jefe del proyecto nos explicó: las vacas menores de dos años son llamadas hembras, después ya son consideradas vacas. En el contexto todo muy bien, pero esa frase no tiene desperdicio!!

La siguiente lectura sólo me hizo gracia a mi, porque hace no mucho trabajé con un argentino y fui aumentando vocabulario. Y en esto que el otro día en el curro leí lo siguiente escrito en un proyecto: “riesgo de la posibilidad de cachear la ortofoto” y digo, qué? y tanto q es un riesgo!! y bien grande!! q te hagan una foto del ojete mientras te cacheen... tela!!

Pues una ortofoto (inculta yo, cierto es) es un producto cartográfico generado a partir de aerofotografías. Pero para más inri, en mi trabajo no hay variedad cultural y no conocen la expresión “que te den por el orto” y a la fotografía en cuestión, la llaman "orto" para abreviar... Así que yo oía todo el tiempo que si orto por aquí, que si orto por allá, que si no se veía bien la orto (aunque cambie el género yo sigo imaginándomelo), que si había que agrandarla… qué imagen, por favor!! Y cómo querían agrandar eso??? Qué iban a usar?? vaselina?

miércoles, 18 de febrero de 2009

Diccionario Asturiano-Pucelano

Cuando tenía 12 años nos mudamos desde Asturias, concretamente la cuenca minera, a Valladolid, cuna del castellano, según cuentan.


En mi casa me decían que yo no tenía acento. Mi abuela alardeaba de que su nieta podría presentar el telediario de lo bien que hablaba!! Sí, los presentadores suelen tener acento neutro, cuando eres de una zona en la el final de la frase no viene marcado por un punto, sino por un "Oh!", se aprecia.

Cuando llegué al colegio, sin embargo, los niños no debían de haber escuchado a mi abuelita, porque según ellos hablaba “raro”. Por aquella además, en la tele se anunciaba Central Lechera Asturiana con el eslogan “¡gracias por confiar en nosotros!” que ponían en boca de lugareños de donde Cristo perdió la chancla cuando veraneó en Asturias. Y eso que se fue antes, sin pagar los últimos días de la casa rural porque no paró de llover, pero eso es otra historia. Recuerdo perfectamente las caras de los dos paisanos con la boina a rosca y el añito que me hicieron pasar...


De estos años en Valladolid comprendí cómo somos incapaces de entendernos incluso hablando castellano (yo no sé bable, si lo leo lo entiendo en cierta medida, pero no lo hablo).

Unas cuantas anécdotas tenemos mi familia y yo, a parte de las vergüenzas que a veces pasamos al pedir cosas en una tienda o las risas cuando se sufre un malentendido peculiar debido al lenguaje. Y ojo, que las palabras están en el diccionario de la RAE (Real Academia Española), sólo que en desuso, en castilla al menos.


Varias entradas dedicaré a formar este valioso traductor, cuando me vengan a la cabeza, puesto que aún hoy, se creen que me invento las palabras, ya que no me las habían escuchado antes. Y además, porque al regresar a mi tierra natal, me ha pasado al contrario, vengo sin acento y no comprendo todo lo que me cuentan.


Estas son las tres pequeñas historias de muestra que me han venido a la cabeza:


Posarse: de esta se acuerda mi hermano, que yendo con compañeros de universidad en Pucela dijo en el autobús: “Yo me poso aquí”. Descojone. Ein? Pues en Pucela sólo las gallinas o las moscas se posan, las personas sólo se bajan del autobús, no hacen nada más, ni brincan, ni nada, se bajan, son muy civilizados. Las risas fueron porque la imagen que dio mi hermano al decir esa frase es la misma que cuando ves a una gallina asentar el culo para calentar un huevo. Un hombre está feo que lo haga.


Tendal: En Valladolid: tendedero. Yo la verdad que no veo tan complicado asimilar que un tendal es un tendedero, pero mi profesora de lengua de octavo de EGB, una monja a la vieja usanza, que te clavaba el sello del dedo en la cabeza cuando te confundías o te tiraba tizas si hablabas en clase, no vio parecido razonable entre ambas palabras. Se me ocurrió utilizar en una frase ese sustantivo. Me sacó a la tarima, me ridiculizó delante de toda la clase y me hizo buscarla en el diccionario para que todos viesen lo estúpida que era yo. Pero oh, cielos!! Si tendal existe!!!! Qué sorpresa! No hubo disculpas públicas, por supuesto y el mal trago me lo llevé.


Cierrapollera: Esto se lo pidió mi madre a una dulce dependienta en una mercería. No sé si en el resto de España se dice. Se trata de un corchete, eso, un simple corchete. Mirando por la web he visto que en Latinoamérica se usa, pero en castilla no y suena a algo muy muy feo. Cuando llegué a casa mi madre aún estaba roja. También he visto que en otros sitios lo usan como cremallera, es decir, literalmente: que cierra la pollera. Pero es que en Latinoamérica una pollera es una falda.


Repunante: No es repugnante, no, sino “repunante”. Se dice de ese estado, sobretodo de los niños pequeños, cuando no han dormido siesta y están en plan “joooooo, guaaaaaa, no quero!! Joooo, guaaaaaaa, eso nooooo, guaaaa” y así toda la santa tarde. También les pasa a los adultos cuando se quejan por todo y, para que engañarnos, a las mujeres en particular en esos días… estamos repunantes cuando no te apetece nada, discutes por todo, no hay ni un simple trapillo en tu armario ropero con cincuenta perchas y 20 pares de zapatos que te siente bien ese día y estás gorda, sí, sí, tu culo de ayer a hoy ha aumentado 2 tallas de pantalón, esos días, digo.

Esto viene del asturiano directamente, en Valladolid no tienen exactamente palabra para nombrarlo, de los niños suelen decir que están “guerreros”, aunque no es puntualmente lo mismo. Y de las mujeres… mejor no le digas a ninguna que está “repunante”, que te entiende: “estás asquerosa” y como encima sean los susodichos días… la has hecho buena llamándola eso a la cara sin pudor alguno! cómo se te ocurre!! Mi hermano se lo soltó a su novia, aunque sigue vivo.

martes, 17 de febrero de 2009

El pendiente del príncipe Alberto

El pendiente del príncipe Alberto no cuelga de una de sus orejas, como cabría pensar… o no, según sea de calenturienta vuestra mente.

El tal príncipe Alberto da nombre a un piercing que no deja indiferente. Se sitúa en el pene, ahí, en la puntita justamente, se mete cual candirú (ese pececillo que es atraído por el embriagador olor a pis en el agua y se convierte en una pesadilla en el Amazonas) saliendo por el frenillo, como muestra el dibujillo (vale, el pareado estaba a huevo, mis disculpas):

El susodicho dibujo está al final, para que no apareciese arriba de la página y ya os desvelase el tema, no miréis mal, hay que dar la sorpresa. A parte, el que no quiera ver algo así que no mire, que aviso está después.

El origen de este pendiente tan molón no está del todo claro. Se usaba en Europa hace siglos y fue rescatado entre la comunidad gay sobre los años 70 (qué de vicio que había por esa época… qué ocurrió?).

El chico que me hace cosas (no hablo de mi novio, viciosillos, sino mi tatuador) me comentaba una vez que todos los piercings genitales van encaminados a dar gusto a la mujer. Los que nos ponemos nosotras son para propocionarnos roce en nuestras partes (por cierto, otro día explicaré la diferencia entre un piercing en el clítoris y uno en el capuchón del mismo, que comúnmente se confunden). Los adornos que se “cuelga” un hombre, son también para proveernos de buenas sensaciones a nosotras, es más, he oído que incluso pueden ser molestos para ellos a la hora del coito. Se sitúan en la base del pene o sobre la bolsa escrotal para que roce con la zona erógena de la mujer cuando el miembro esté dentro de la vagina (sí, eso, que choca en el frontón mientras follas, pero es que la otra forma es más fina). Otros pendientes sirven para engrosar el tema en cuestión, ahí, aumentando diámetro. Pero he de decir que el príncipe Albert este, encontró una utilidad muy buena a agujerearse el pito (este sinónimo no lo había usado).

Una de las historias cuenta, que el tal señor tenía un miembro viril cual bailarín de "el lago de los cisnes" y en su época no había calzones, por lo que le incomodaba que se notase su féretro real a través de la ropa. El tío sin más pensarlo, ideó un sistema: plantarse una anilla en la punta del pijo y una cadena a la cintura, de tal forma que enganchaba el rollo de carne al cinturón (me estoy currando los sinónimos, señora!) y ¡¡santas pascuas!!

Y aquí va un dibujillo cutre mío del piercing en cuestión y la supuesta simulación del problema real:


También existe el inverso, que sale por encima del glande. Da grimilla, sí y eso que yo tengo algún que otro piercing, pero ese me da cosita.

Y lo peor de todo, es que existe el llamado princesa Alberta, del que no he visto foto alguna y tampoco me quedaron ganas de buscarla. La idea, pues la misma en versión femenina: entrar por la uretra y salir por la vagina. Podía haber masacres cada vez que la princesita tuviese sexo… cinturón de castidad quizás? Eso me lo he inventado, ya que este piercing es muy nuevo, no tiene ninguna historia antigua relacionada, simplemente, como diría Freud: envidia de pene. "Que no tengo uno? Pues me lo planto en la vagina, que no??"

Y con esta fantástica imagen, lo sé, yo también apreté las piernas fuerte al leerlo, os dejo.

lunes, 16 de febrero de 2009

Bienvenidos a mi normalidad...

Rara. Así, en una palabra: rara. O extravagante, a mi me gusta más esa otra. Lo he oído toda mi vida: rara. Yo sigo considerándome de lo más normal, pero no, no, acabo de cambiar de curro y he vuelto a notar otra vez eso, que según me van conociendo me dicen que estoy un poco loca, que dónde oigo esas noticias, por qué me sé esas historias, que soy friki. Esto también: friki.

Y en broma me dicen que doy miedo… Doy miedo porque sobre mi mesa de trabajo tengo un portamóviles rosa chicle, un muñequito de un cerdito rosa y una miniatura de un Alien (de la peli, Alien, la fantástica criatura de H.R. Giger). Por cosas como eso último, soy friki.


Desde pequeña era rarita. Me dedicaba a dar vueltas y vueltas al parque, jugaba “a correr”, así, sin más. Sí, ahora lo pienso y lo veo un poco estúpido, pero a mi me molaba…

En el recreo jugaba a “la pesca” o “a pillar” o “a rescate” con los chicos, y corría más que ellos, también les sacaba una cabeza casi, pero bueno. Las chicas me llamaban cuando sufrían alguna injusticia por parte del sexo opuesto, y ahí iba yo y les zurraba. Sí, daba un pelín de miedo… pero ahora no, ahora soy muy dulce. Pero si te cuento que tengo una fusta en casa… también te doy miedo, jeje.

Esa es otra, no hay conversación que no pueda enlazar con sexo, sip.


Así pues, en este blog soltaré todas esas extravagancias mías, esos estudios tontos que alguna vez salen en la última página de un periódico o en el telediario de Antena3 cuando no tienen qué meter… aquello a lo que la gente “normal” no atiende, pero luego le divierte oír. Yo hago ese trabajo sucio… no sé cómo va la bolsa, si estamos en liga o no, cómo se llaman todos los ministros… pero tengo una de datos tontos en la cabeza que sólo sirven para charlar en el café con los compis de curro; para que luego me digan eso: rara.


También habrá sexo, of course!! Pero no guarradas así porque sí, sexo gratuito, sino curiosidades, sexología, “cosas de chica” traducidas al lenguaje de macho... y eso último es gracias a que hace años que casi trato con hombres únicamente (por los estudios, por el trabajo, por los amigos… me veo rodeada de ellos) y me han preguntado muchas veces cosas, es hora de darlas a conocer a un más amplio rango (o no, porque este es un simple blog…).


Bienvenidos a mi normalidad!!